El cañón Tigre y el Almirante Nelson
Buenos días
querido lector:
Hoy vamos a ver
otra curiosidad histórica. Una de las memorables de mi tierra que enorgullece e
involucra a uno de los personajes más emblemáticos de la historia inglesa:
El almirante
Nelson.
Y el cañón
Tigre.
Bien es sabido
que las Islas Canarias era un punto estratégico en las rutas navales, quién las
tuviese tendría el punto de repostaje antes de cruzar el Atlántico con vistas a
las Américas (o a su vuelta).
La carrera en
conquistar Canarias fue ganada por la Corona Española, sin embargo, eso no impidió
que otras potencias intentaran hacerse con ellas igualmente.
Los ingleses
estaban muy interesados en poseer las islas y durante mucho tiempo lo
intentaron. En uno de sus ataques enviaron a su almirante con una flota de
navíos y 900 hombres.
Para el año de 1797
Santa Cruz empezaba a tener un puerto importante, pero con plaza fortificada y
fortines artillados situados en la costa
y en las alturas, dado las numerosas veces que debían defenderse de piratas y
corsarios.
La madrugada del
21 de julio de ese año los santacruceros divisaron a la flota inglesa y
avisaron al Gobernador. Éste mandó a llamar a las milicias santacruceras (es
decir, en su mayoría los propios vecinos) y un destacamento francés.
El primer
intento de desembarco de Nelson fracasó por vientos desfavorables. El día 22
logró desembarcar en la playa de
Valleseco. Pero hubo de retirarse, el abrupto terreno le impedía llegar y
defenderse de las milicias que disparaban desde el castillo de Paso Alto.
Realizó otro
intento el 25 de julio con unos 700 hombres y de forma sigilosa desembarcaron
en la bahía para coger por sorpresa, pero la Fragata de San José dio la voz de
alarma, así como el castillo de Paso Alto.
Los santacruceros
descargaron toda su artillería contra los ingleses infringiendo numerosas bajas
y, fue en este día, donde Nelson perdió un brazo arrancado por uno de los
cañones que defendían la bahía: el cañón Tigre.
Este cañón
estaba situado en la tronera del Castillo de San Cristóbal, colocado a baja
altura para dificultar el desembarco en la playa.
Hoy en día es el
cañón el símbolo de esta victoria que encumbró de gloria el 25 de julio y
obligó la rendición y retirada del almirante. Si bien es verdad que no se puede
demostrar a ciencia cierta que fue justo este cañón el causante de la pérdida de
su brazo (pues había más cañones dispuestos para defender) se le adjudica a
éste. Alguno de ellos fue, evidentemente, y uno de ellos debía ser escogido
para ser recordado y sirviese de ejemplo de la fecha señalada. Como suele pasar
con innumerables símbolos repartidos por todo el globo.
Este cañón hasta
hace poco se podía ver en el museo militar de Santa Cruz (El Almeida). Pero hoy
en día se puede ver bajo la Plaza España de la capital. Para mostrar donde
estaba colocado aquel día para la defensa.
Si nos
preguntamos por su origen, fue forjado en los hornos de Sevilla en 1768. Así
que este cañón une intrínsecamente la historia de Canarias con la de su nación;
así como con la inglesa.
Atentamente,
Elena Rojas
0 comentarios:
Publicar un comentario